MARCIBOY: “Vine para quedarme”

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Desde El Calafate, una de las postales más imponentes del sur argentino, emerge una figura que lleva ocho años construyendo su lugar en la música urbana. MARCIBOY, o simplemente Marci, es un artista que no solo representa su ciudad, sino que también busca poner en alto la escena del sur del país. Con un recorrido lleno de momentos clave y un enfoque en la innovación, Marci nos cuenta su historia y sus sueños en esta entrevista exclusiva.

¡Del J7 a los escenarios!

Marci recuerda perfectamente el momento en el que decidió dedicarse a la música. “Fue un día que marcó un antes y un después. No tenía mucho más que un J7 y una all-in-one, pero con eso me bastó para grabar mi primer tema, Fuck You. Lo subí al canal de Surside Records y desde ahí no paré. Quería innovar, hacer algo que no se había explorado tanto en Calafate y, de a poco, ir armando mi lugar en la escena.”

Con el tiempo, su nombre empezó a resonar cada vez más en el circuito local, y su gran hito inicial fue presentarse en la Fiesta Nacional del Lago, un evento que marca a fuego el calendario cultural de la ciudad. “Tocar ahí fue un sueño cumplido, pero también un impulso para seguir. Fue como si me dijera: acá es donde pertenezco.”

Una paleta de colores y matices

Cuando habla de su evolución musical, Marci lo hace de una forma casi poética: “La describiría entre colores y grandes matices de gris”. Su estilo es un reflejo de sus influencias y de sus ganas de experimentar. “He pasado por transiciones en las que exploré muchos géneros. Hoy en día sigo en esa búsqueda con estilos como el surf, el jerk, el glo, el Detroit, entre otros. Mis letras también han cambiado mucho, aunque hay veces que ni siquiera escribo: simplemente fluyo. Por ejemplo, Bohemian Groove Bars salió entero de un freestyle.”

Momentos clave y una escena que late

En su recorrido hay hitos que marcaron su crecimiento. Además de su show en la Fiesta Nacional del Lago, destaca la adquisición de su home studio, un espacio que ha ido perfeccionando con el tiempo y que considera fundamental para su desarrollo como artista. También menciona colaboraciones que, según él, “nadie se espera”.

Sobre la escena de El Calafate, Marci tiene una visión clara: “Es una movida unida, pero a la vez cada uno tira para lo suyo. La mayoría partimos de una misma base y, aunque nuestros caminos sean distintos, vamos todos en la misma dirección. El público local es increíble, te apoya aunque no te conozca. Lo he visto conmigo y con artistas que vienen de afuera.”

A nivel regional, también nota un crecimiento importante: “El sur se está haciendo notar mucho más que antes. Siento que ahora el ojo de los grandes está puesto en nosotros, no solo en Buenos Aires. Claro que todavía somos grupos cerrados, pero hay muchas ganas de crecer.”

Motivaciones y sueños

¿Qué lo impulsa a seguir adelante? “La gente que me apoya, las ganas de abrir caminos hacia otros lugares y, obviamente, cumplir ese sueño americano de poder vivir de la música.”

Aunque no tiene una rutina creativa estricta, confiesa que los bloqueos mentales son parte del proceso. “Hay días en los que no me encuentro en ningún lado, pero eso nos pasa a la mayoría. Al final, siempre termino volviendo a mis influencias, que van desde bandas como Sumo y La Renga hasta referentes como El Duko y la electrónica.”

De cara al futuro, MARCIBOY sigue construyendo su camino con una visión clara: “Vine para quedarme.” Su música, una mezcla de colores, matices y estilos, refleja no solo su esencia, sino también el latido de una escena que empieza a hacerse oír con fuerza.

¡El Calafate tiene a su representante!

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